Blusa
y aire
El
aire la acaricia sin buscar excusa
sabedor
de que nadie le pondrá reparo,
pues
en sus ademanes nada es raro
y
por eso tanto juguetea con tu blusa.
Sabe
ya que es de gasa, y dos limones
bajo
ella desatados bien conoce.
Satisface
sus instintos con el roce
por
la tela que sugieren tus pezones.
Quisiera,
como el aire, poder rondar tu pecho
sin
que no me acusases jamás de haberlo hecho.
Muy bonito tu poema. El aire es muy sabio, al igual que el mar , la brisa... Pueden rozar y retozar sin reparos. Es la Naturaleza:)) ¡enhorabuena! Has conseguido profundidad en pocas palabras. Por supuesto seguiré leyendo el resto. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias Margot.No suele entrar mucha gente que se moleste en dejar un comentario agradable como has hecho tú. Te doy las gracias y hago extensivo tu abrazo.
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